En una alianza efectiva entre el Municipio y el gobierno bonaerense, Florencio Varela ha presenciado una iniciativa pionera que ha convertido sus escuelas en vibrantes centros de entretenimiento durante las vacaciones de verano.
La colaboración entre ambas entidades ha tejido una extensa red de actividades recreativas y deportivas, abarcando 2 secundarias, 2 centros de educación física, 29 primarias y 8 dependencias comunales.
Operando de lunes a viernes, de 8 a. m. a 12 p. m., estos espacios han brindado opciones atractivas para niños y jóvenes, atendiendo a edades que oscilan entre los 5 y los 17 años, en esta temporada estival.
Uno de los epicentros de esta iniciativa, denominada "Escuelas abiertas en verano" a nivel provincial, fue la institución en la calle La Tranquera, en el barrio Agustín Ramírez, con una participación diaria de 70 estudiantes.
Vanesa Álvarez, coordinadora local, compartió insights sobre la estrategia implementada: "Hemos decidido combinar propuestas artísticas con deportes como vóley, fútbol o básquet en el patio, entre el desayuno y el almuerzo, ofreciendo jornadas que fusionan diversión y aprendizaje".
Álvarez destacó la respuesta positiva de la comunidad: "La comunidad en general mostró satisfacción al contar con un espacio seguro para los niños de la zona, asistiendo no solo alumnos regulares sino también niños de la comunidad".
En este contexto, la vicedirectora de la institución anfitriona enfatizó la importancia de las obras municipales, resolviendo una demanda histórica al reacondicionar la instalación de gas. "Los trabajos finalizaron en noviembre, dejando todo listo para preparar la comida de los niños todos los días, incluso durante las vacaciones", explicó.
Cambiando el tono hacia experiencias más personales, Tiago y Johan, participantes activos, compartieron sus vivencias creativas durante estas vacaciones en la escuela, destacando el dibujo de autos de carrera, pruebas de puntería con balones en diferentes aros y sus habilidades en una apasionante partida de ajedrez. Ambos coincidieron en que "jugar a la pelota fue lo que más nos gustó".